-Esta noche iremos a conocer a la bailarina de flamenco porqué
dicen que es divina- pensó Armando
mientras encendía un puro y saboreaba un café, sentado en uno de los bares más
elegantes de Cádiz.
Acabada de nacer,
Lucia tomo es sus brazos a la niña que tenía la boquita cómo un botón de rosa, por lo pequeñita y roja, los ojitos
ligeramente achinados, que le daban una iluminación muy especial, a su risueña cara;
la naricita era un turroncito de almendra
y las orejitas perfectas como las de “Babis.”
Su pequeño mentón era redondo y liso con
un ligero tono nacarado igual que los caracoles de mar.
Fue bautizada en la Catedral de Cádiz, donde se venera a la Inmaculada Concepción,
rodeada por sus padrinos y una parte de la familia .Pasaron más tarde a la casa de Lucia y Manuel donde se
sirvieron empandillas y refrescos. Su madre era una excelente costurera
conocida en el mundo de la farándula como
creadora de los trajes típicos que
usaban las bailadoras de pasodobles, tangos, tanguillos y bulerías.La manos
de su madre, iban creado los trajes de con una gracia y belleza tan singular, enriqueciendo los tafetanes y sedas a los cuales les añadía flecos
y volantas, a los elegantes vestidos y batas de cola. Esta prenda ha sido oficializada
como el traje la más apropiado para asistir a las ferias.
María de la
Luz Fernández y Cuevas, más conocida como la bailarina: “Lucero Cuevas”, iba creciendo
en un hogar toda armonía, entre telas,vestidos de lunares, cantos y leyendas, soñando que algún día se convertiría en una bailarina
de flamenco como siempre había soñado, desde que era niña.
Cádiz fue bautizada por Lord Byron como la “Sirena del Océano”, y se le conoce popularmente como la <La tacita de Plata>.Se destaca por sus playas y fiestas, pero lo ideal para quienes la visitan, es perderse en una noche de verano a “tapear “por los barrios más hermosos de Cádiz, o acudir a los carnavales mas excitantes y llenos de colorido de esta región, disfrutando de su música.
Desde la
antigüedad los pueblos gaditanos al igual que los niños y o las muchachas de Cádiz eran junto con los de egipcios y sirios los más
apreciados en Roma, por sus cantos y bailes.
Siendo apenas una
niña de cinco años su madre la inscribió en
una escuela de danzas, para que
aprendiera todos los secretos del buen arte flamenco.
Desde el siglo XIX, se conocen canciones y
piezas musicales como: “La fille de Cadix”, el cuarto movimiento de la
Suite española para piano, titulado “Cádiz”, un bolero Puerto de Tierra y la
Rumba de la Coleta.El baile flamenco
desde un punto geográfico así como el
canto, se encuentra en el área de Cádiz en los puertos.
María de la Luz Fernández
y Cuevas, fue una alumna aventajada
aprendiendo, pasodobles, tangos, tanguillos, seguidilla y soleares mientras,
su padre por el día trabajaba en una
biblioteca y de noche animaba como cantante en café del puerto. Dé carácter alegre y simpático por excelencia se metía en un bolsillo al público con sus
chistes y las últimas novedades del repertorio
español.
Manuel Cuevas
además era un excelente cocinero, famoso por sus platos de mariscos y
pescado,todos los fines de semana preparaba unos filetes de mero al horno, de
rechupete y otro con frutos del mar.
El Flamenco
gaditano se fraguo en los cuartos de Cabrales, ventas, colmaos y tablaos gitanos,
muchos han sido los cultivadores de este género durante años y Antonio Gades, bailarín alicantino toma su
nombre artístico del romano de la ciudad, cómo una clara referencia del prestigio
que el mundo de la danza tuvo en la misma, y allí conoció a Lucero.
Llego el día
donde Armando un enamorado del flamenco,
conocería los misterios de ese baile tan sensual y contagioso como los perfumes
de azahares sevillanos. Lucero Cuevas, fue anunciada por su padre para comenzar el espectáculo. Con
su ajustado traje de cola que ceñía todo su cuerpo, se presento en el tablao.La pista quedo totalmente iluminada y
apareció la bailarina.En sus hombros llevaba un mantón que le había
hecho su madre y la bata de cola, especial para una reina.Terminado el
baile, se presentaron en el camerino,
muchos amigos y conocidos, de su familia para felicitarla. Entre los cestos de
flores que le habían enviado, se destacaba uno de los mas hermosos,
con una tarjeta donde la felicitaban por sus éxitos, del empresario Armando de Córdova, presidente de Espectáculos Musicales, “Sol de Andalucía”, solicitándole,
que le concediera una entrevista.
En una tarde cálida
del mes de mayo, después de haber celebrado su cumpleaños y los recientes
éxitos María de la Luz Fernández
Cuevas, se encamino a tener la entrevista con el Sr. Armando, para conversar
acerca de posibles negocios en el futuro. Tan pronto llego a la oficina la empleada le dijo que inmediatamente iba a informar a su jefe acerca de su llegada.
Sé había perfumado con Chanel numero cinco que era su perfume preferido y que
según sus creencias, le daba suerte. Tan
pronto recibió la llamada de su se secretaria para saber que ella había
llegado, se levanto y abrió la puerta
del despacho y personalmente, la invito
a pasar.
-Sra, luce usted
esplendida y ahora que la tengo sentada frente a mí es más bella de lo que
había imaginado cuando la vi bailar hace días-
El contrato
estipulaba que Lucero Cuevas haría una gira, primero no solo por todas las regiones de
España, sino que además lo haría en distintos países europeos y en América durante los
próximo dos años.Incluía a un acompañante, servicios y gastos de los
diferentes hoteles donde se hospedaría.
El Sol de Andalucía, por mediación de cables y llamadas
telefónicas se ocuparía de hacer las reservaciones en los distintos lugares
donde bailaría .Toda la “Tournée” fue un éxito y junto con la estrella del flamenco, viajaron
los cantaores y músicos acompañantes.
De regreso a Cádiz,
el Sr. De Córdova, la invito a que
descansara unos días en una finca, que tenía en Jerez de la Frontera, junto a
sus padres, donde disfruto de unas
pequeñas Vacaciones.
Armando ,silenciosamente
se había enamorado de la bella bailarina, pero no encontraba el momento de
confesarle el inmenso amor que sentía por ella
y todos los días le enviaba un ramo de flores con diferente mensajes y la invitaba a cenar .Era apuesto,
servicial y vestía elegantemente con una flor que en señaladas ocasiones prendía
a la solapa del traje. Le llevaba cinco anos a Lucero, nombre que adoraba .Gustaba,
contemplar al astro de la tarde, Venus que se hacía más brillante a medida que
iba anocheciendo.
No lo pensare más
y esta misma noche cuando estemos cenando, le declare, mi amor y le preguntare
si quiere ser mi esposa.
Terminaron de
comer y Armado le refirió todo lo que desde hacía mucho tiempo, había sentido
por ella. Por breves segundos, que le parecieron años al enamorado pretendiente, Lucero acepto la propuesta de
matrimonio, pero con una condición; de que nunca la obligara a abandonar su
carrera.
Hoy 17 de Junio del 2014 llevan felizmente diez años de casados, que
sellaron brindando con Champán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario